Cuando nos enfrentamos a la tarea de mantener nuestro hogar, a menudo nos olvidamos de limpiar ciertos electrodomésticos que son fundamentales en nuestro día a día, como es el caso del lavavajillas. La limpieza de este aparato no solo garantiza una mejor higiene, sino que también asegura su correcto funcionamiento y alarga su vida útil. Surgen interrogantes como: ¿Por qué mis vasos no quedan del todo limpios?, ¿Será que el lavavajillas está averiado o simplemente necesita mantenimiento? La respuesta puede ser más simple de lo que pensamos. En este artículo, abordaremos cómo realizar una limpieza efectiva de nuestro lavavajillas, con pasos detallados y consejos prácticos para resolver esos problemas que a veces nos dejan perplejos.
Limpieza de las hélices del lavavajillas
Las hélices son una parte fundamental en el proceso de limpieza del lavavajillas, ya que son las encargadas de distribuir el agua durante el ciclo de lavado. Con el tiempo, pueden acumular restos de comida que afectan su funcionamiento.
Retirada y limpieza de las hélices
Para su limpieza, es necesario retirar las hélices y lavarlas con agua a presión. Esto ayudará a eliminar cualquier residuo que pueda haber quedado atrapado en su interior.
Revisión de los agujeros
Es importante prestar atención a los orificios de las hélices, ya que pueden estar obstruidos. Una vez retirados los restos de comida, enjuaga la hélice para asegurar que queda completamente limpia.
Limpiar el filtro del lavavajillas
El filtro es otro componente crítico que requiere mantenimiento regular para prevenir olores y garantizar que el lavado sea óptimo.
Desmontaje y limpieza
Desmontar el filtro y limpiarlo con agua fuerte y un estropajo con jabón, asegurará que no queden restos de suciedad. Posteriormente, es necesario enjuagarlo bien para que no queden residuos de jabón.
Uso de vinagre para la limpieza
El vinagre es un excelente aliado para la limpieza del hogar debido a sus propiedades desinfectantes y para eliminar el sarro.
Colocación y cantidad de vinagre
Colocar un recipiente en la bandeja superior del lavavajillas y añadir aproximadamente 400 mililitros de vinagre es suficiente para una limpieza profunda.
Inicio del ciclo de lavado
Con el vinagre en su sitio, iniciar un ciclo de lavado normal sin añadir detergentes ni pastillas de lavado, permitirá que el vinagre actúe durante todo el proceso.
Revisión final y ajustes
Una vez finalizado el lavado, es importante revisar que todo esté en su lugar y realizar los ajustes necesarios.
Comprobación de las hélices y el filtro
Asegúrate de que las hélices estén bien enroscadas y el filtro correctamente colocado para evitar problemas en el siguiente ciclo de lavado.
Añadir sal si es necesario
Finalmente, si tu lavavajillas tiene un indicador de sal y éste se encuentra en rojo, es el momento de añadir sal especial para lavavajillas. Si no indica necesidad, puedes omitir este paso.
Con estos sencillos pasos, tu lavavajillas quedará limpio, brillante y desinfectado. Una rutina de mantenimiento como esta no solo mejora la limpieza de tu vajilla, sino que también asegura el buen funcionamiento y conservación de uno de los electrodomésticos más utilizados en la cocina.
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